Una Odisea de dolor y revelación

El monstruo me visitó y me dejó tendido en la desolada tierra de los hospitales. Solo fue la bienvenida a un infierno que duró dos años y veintiocho días.

El Amanecer Tras la Noche Más Oscura

Somos hijos de aquellos que, con valentı́a, miraron al abismo y eligieron caminar hacia la luz. Y ahora, en nuestros hombros, recae la responsabilidad de preservar su legado, de ser la voz de aquellos que ya no pueden alzarla.